“Hace falta
mucha infancia. Hace falta días y días de aliteración del misterio,
y también
noches y noches sin más movimiento que la falsa calma de los relojes”.
“Sólo
cuando llegó a la Roca de la tristeza, la niña se detuvo.
Abrió
su alforja sin prisa y dijo: Todo empieza a vivir. La eternidad comienza.” Maria Negroni, Elegía Joseph Cornell
No hay comentarios:
Publicar un comentario